sábado, 19 de julio de 2014

Gato

Qué puedo decirte, solo soy un gato.
Todos tus movimientos los sigo, y los asimilo.
Por si no entiedes de indirectas, tengo una sonrisa de botella.
Recorro tu vida con electricidad forzada;
te intuía así, temprano, miriadas de cerebros, todos intuidos y todos lejos.
Tu manera de acercarte es alejarte un poco.
No puedo cantar yo solo.Necesito de tu voz.
Tú mecanismo de acción se parece al de la risperidona: primero me sedas, luego mi inundas, para después dejarme inmerso en una totalidad de sombras y llanto.
Y tú lejos.
Te mandaré un dedo o una mano,
por si no hay cadenas que nos unan, al menos habrá imágenes que nos maten.

No hay comentarios:

Publicar un comentario