Qué vientos la entretienen, señorita, llega tarde a nuestra cita...
Lo siento, pero se me hizo imprescindible conversar con usted antes de escribir
pero es una tortura que podemos ir callando
es un silencio que me puede ir torturando
imaginar que usted viaja en otro cielo
mientras yo me quedo quieto quieto
sosteniendo mi teatro arropando mi nostalgia
mientras escucho la misma canción que me trajo a la ribera de tu boca
para plantar mis besos para sumergirme en tu lengua
y desde allí poder anunciarle a la melancolía que yo quiero crear
un puente entre tu indiferente burbuja y mi silla de paralótrocos
Tuya mi vida tuya mi tortura tuya mi luz
tuya mi despedida tuya mi garganta tuyo mi desliz.
Tuya mi decisión tuyo mi tiempo tuya mi espera
tuya mi generación tuya mi locura tuya mi demencia.
Señorita, qué sonrisa la entretiene?, ya llega tarde a la cita...
La noche sabe esperar, pero el sueño atrapa y no se puede retener
Ni siquiera tengo ánimos de perpetuarme en un suspiro,
solo este tirria y esta pereza,
esta espera esta noche que me envuelve de ambar y nostalgia
de nostalgia y otro beso, mecánica tensiva, tus ojos diurnos
la noche que nos arropa, tus labios en retirada.
Y yo tan lejos tan lejos tan lejos
No hay comentarios:
Publicar un comentario